Aunque la administración financiera de tu compañía sea sólida existen 3 peligrosos gastos, considerados como “invisibles” por camuflarse dentro de las necesidades de la operación corporativa diaria, que pueden presentarse con facilidad y dañar considerablemente la economía de toda empresa. Por lo que, estar conscientes de su existencia y tomar acciones contundentes para evitarlos es fundamental para mantener una correcta salud financiera.
Para lograr dicho objetivo comencemos por descubrir cuáles son dichos gastos:
Fugas cuentagotas
Son todos aquellos gastos “insignificantes” que se presentan cotidianamente y que no se consideran relevantes, pero que si se miden por periodos de tiempo prolongados, como trimestres, semestres o años, la percepción que se tiene sobre ellos será muy diferente. Normalmente son resultado de una mala planeación o prospección de necesidades, el ejemplo más común de este aspecto se puede observar fácilmente cuando el material de limpieza no es suficiente y debe adquirirse aunque no haya estado contemplado previamente en el presupuesto.
Eventos de representación no planeados
Quizás el tener que absorber el costo de una comida corporativa inesperada no se considere una situación grave, sin embargo, si fuesen viajes de negocios consecutivos que no se encontraban prospectados, la situación económica se ve mucho más comprometida. Para estos casos, se recomienda contar con un fondo de respaldo destinado a poder cubrir los gastos de representación no planeados, el cual permita a la compañía cumplir cabalmente con ellos sin sobresaltos ni dificultades financieras.
Servicios
Los servicios básicos que requiere una compañía, tales como agua, luz, Internet y teléfono, normalmente están considerados dentro del presupuesto mensual, sin embargo, existen algunos aspectos menos comunes a los que también debe prestarse atención, por ejemplo, los desplazos en taxi que necesitan realizar los colaboradores, pero si, por ejemplo no se prevé que durante un mes específico estos aumentarán por temporalidad el presupuesto asignado podría resultar no ser suficiente y por tanto representar un gasto adicional para la compañía.
¿Tenías presente la existencia de estos gastos invisibles? En caso de que tu respuesta sea negativa, esta es una buena oportunidad para hacerlos conscientes y analizar cuáles son las acciones ideales para detenerlos y en el mejor de los casos evitarlos.